miércoles, 7 de enero de 2009

Día gris, final feliz.

Pues acá va el primer post del año...es una vomitada de las mías acompañado de un final feliz. Por lo menos...así no se cansan de leer.

Primero, feliz año...todo empezó bien! digamos que sin tanto entusiasmo como en años anteriores...en fin, un poco de tropiezos por aquí y por allá...pero nada no solucionable...

Hoy como que comenzó la gente a regresar de las vacaciones...había más personas en las calles y la cola ya empezó a formarse. Total que hoy tenía mi día perfectamente planificado y no pude hacer ni la mitad de lo que quería. Mercurio nuevamente está retrógrado! por eso creo que me lo tomo con soda y ya.

Me salió una ampollita en el pie derecho, luego tuve que cubrir a alguien en una mentira, luego un peín en el banco, luego, el estrés de la cita, luego...el estrés del embarque... también, un peín que me sacó de mis casillas...un poco decepcionante porque yo creo que definitivamente han sido demasiado complacientes...como que no se adaptan a que las cosas cambian. Por qué lo que es bueno pa'l pavo, no es bueno pa' la pava? por qué si yo admitiendo que cometí un error, no puede admitir el otro que también lo hizo? que mucho habla pero poco hace? uno se cansa...y lo peor es que entonces siento que anyway anyhow...estoy preocupada porque me veo más sola que la una en ese caminito culebrero. Decidí buscar opciones afuera...ya no estoy convencida de nada acá. No sé chama pero ciertamente, en marzo estoy flying! that's the point.

En fin...luego de tanto drama, vomitar, quejarme etc...salí del trabajo histérica hablando por teléfono hasta que llegué a casa de mi nana y vi a esas dos pulgas, que salieron corriendo, me abrazaron se enloquecieron al verme y dije que nada de lo que me había hecho molestar merecía mi atención. Definitivamente, mis sobrinos son mi vida, mi escape, mi todo, son parte de mí y por ellos me muevo...son quienes me hacen ver que vale la pena seguir luchando y que hay cosas más importantes a las cuales prestarle atención.

Samarita es un avión, y Sofía es mi perfecta creación. Les enseñé el cuento del gallo pelón y fue la diversión de la noche jajaja. Sofi tiene un diente flojo, y Samara baila todo lo que le pongan mientras quiere aprenderse el cuento del gallo pelón jajaja.

No sé hasta cuando esté mercurio así, pero me sabe a boliña. Lo demás puede irse a la porra. Si voy a tener todos los días con un final feliz como el de hoy que se quede así entonces.